IX

Goteando como siempre
llego
cuando las luces están apagadas
y los pisos son nichos;
cuando las manos van más rápido que el corazón...

No me quedan duros que pagar
por cuatro frases mal juntadas;
así que me voy perdiendo y apagando
sin oxígeno
hasta quedar cubierto de polvo.

Por eso me hundo en tus tetas
y tacho hasta que rompo el papel y el ladrillo.
Y me voy perdiendo y apagando
cubierto por el lodo de tus polvos
goteando luces
que me aceleren el corazón.

Comentarios

Entradas populares de este blog

V

I